Me atrevo a declarar que el pan es cultura en la Ciudad de México. No podemos dejar pasar ese aroma que nos ataca agresivamente cuando nos acercamos caminando a una panadería. Y claramente tenemos el mejor remedio para los sustos: un bolillo.
Rosetta
No te pierdas de su café, es increíble aunque la verdadera estrella que hemos probado en el lugar es el famoso rol de guayaba. Los chocolatines son una pieza clave en este sitio así que anímate a llevar unos para llevar porque seguramente saldrás algo lleno del lugar.
Colima 179, Roma Norte.
La Bohéme
Claramente creada por un francés que sabe perfectamente lo que hace y logró importar el sabor de la panadería de su país. Lo salado viene directito de masa madre (sin artificiales) y está en otro nivel. Lo dulce se mantiene en una empanada rellena de compota de manzana, croissants con almendra (buenísimos) y los roles que ya conoces.
Querétaro 219, Roma Norte.
Maqué
Una cafetería famosa en el parqué México, Condesa. A pesar de tener precios más elevados que lo acostumbrado en las panaderías de la zona, te incitamos a probar sus conchas, el pan de elote y todas las galletas que con tanta dedicación hacen. No te vayas sin probar el chocolate caliente o un buen café.
Ozuluama 4, Hipódromo
Mielmesabe
Esta pequeña pastelería se robó nuestro paladar cuando al caminar por la zona nos llego un aroma muy peculiar y el instinto chilango -por pan- se incendió. Las galletas están para chuparse los dedos y cada uno de los pasteles hay que dedicarles al menos una probada con un buen vaso de leche o un potente café.
Monterrey 225, Roma Norte.